martes, 7 de febrero de 2023

"Quiero Difícil"... Quiero embarrarme...

 




"No quiero nada complicado...nada que me duela... Quiero fácil..." reza una canción  que anda sonando ahí por varias listas de Spotify.  De hecho yo hace unos meses la escuchaba y le había puesto el corazoncito verde sintiéndome en cierto modo bastante representada por su letra.  Quiero fácil, nos llenamos la boca llamando a los ángeles de la facilidad para que nos coloquen pétalos de rosas, nos perfumen el aire, nos pinten nubes en el trayecto... y yo me pregunto... ¿de dónde surge esta idea tan infantil de que algo llamado relación puede ser fácil?  

Definitivamente "No", las relaciones humanas están determinadas por unos entramados que muchas veces ni nosotros somos conscientes de qué teclas nos tocan.  Cuando uno empieza a transitar un camino con una persona, el tipo de relación que sea, amigos, novios, amantes, compañeros de piso, creo que tenemos que partir de la premisa que en algún momento esa paz aparente de los comienzos puede resquebrajarse y está bien que eso suceda. Porque esa relación parte de una persona que tiene una historia que muchas veces no tenemos  ni idea de hasta dónde llega...y la  otra persona de la misma manera tiene una historia que no tenemos ni idea  hasta dónde llega.  Sería totalmente erróneo pensar que porque uno conoce a alguien en un ambiente de determinadas características ese ambiente te acompañará en toda la película que te quieras montar con ese otro u otra.  No, el ambiente irá cambiando, lo que se establezca entre una y otra irá cambiando, la manera de sentir irá cambiando, y mientras todos estos cambios suceden parece que la cosa empieza a ser ...."Difícil".

Horror!!Terror!!  En estas épocas de individualidades tan  bien armaditas, de personitas que no saben cómo tener en cuenta lo que puedan provocar ciertos actos no compartidos, ciertas decisiones no consensuadas, el que el camino se ponga "difícil" es el momento de terror de la película en la que el personaje principal busca escapar abriendo todas las puertas que le llevan solamente a... ella misma.  La dificultad es una gran oportunidad, si supiéramos lo bonito que es escalar una montaña, con lo difícil que es encontrar que el pie entre en esos pequeños recovequitos, que tus manos aguanten el peso, que el cuerpo no se desestabilice, que la respiración te siga acompañando de una manera sosegada dentro de los nervios, y que tu cabeza pueda estar tan presente en ese momento sabiendo que todo eso es lo que tienes que Vivir para llegar ahí arriba. 

La Vida Cuesta  reza otra canción que anda circulando por las listas de otras personas que sabemos que no, que "querer fácil" es muy difícil, y yo diría que imposible.  

Los vínculos que creamos a lo largo de nuestras Vidas, esos vínculos de los cuales esperamos sinceridad y honestidad, no son ni serán fáciles por la sencilla razón que yo no soy tú, y tú no eres yo; y ¡qué bien!, ¿No? ¡¡Si no que aburrido!!  Nos vendieron el mito de la media naranja, ese que nos cuenta cómo el dios Zeus totalmente encolerizado con los "humanitos" por la  soberbia y los  aires de grandeza que éstos desprendían, los mandó a cortar por la mitad y así andan a lo largo de la historia buscando a su otra mitad, buscar la facilidad de "encajar" con otra media  naranja. Fácil. 

Yo estoy por la labor de encontrar la manera de unirme  con otros plátanos, con otras manzanas, con otras uvas, con hacer una ensalada de frutas de mi Vida. Estoy por la labor de "Querer difícil" porque al final eso significa que puedo decir con mucha libertad y confianza lo que me sucede, sin miedo a que los vínculos que establezco por el camino de mi Vida salgan despavoridos  ante la dificultad.  Estoy por la labor de escalar, de sentir que por momentos será dificil, de embarrarme.  Vivir los Vínculos desde ese lugar de cierta incertidumbre los hace muy Vivos! 

Ya no quiero Fácil.  Bienvenido el Barro. Bienvenida La Vida embarrada. 


PD:  Canción para mi cancionero de cabecera Barro Tal vez